miércoles, 6 de enero de 2016

La temporada navideña y su música.


Por Joel García Cobos.

Estamos ya en plena temporada navideña, un espacio en el calendario lleno de color, buenos deseos y regalos, estamos acercándonos a la noche del 24 de diciembre, aunque esta no es la fecha exacta del nacimiento del Salvador del mundo, las personas están generosas.



Desde que comienza el mes de diciembre, los comercios adornan sus aparadores con árboles de navidad, Santa Clos, flores de  nochebuena y lluvias de foquitos de colores, llamando más la atención a las mercancías de temporada que están listas para la derrama económica de aguinaldos y fondos de ahorro.



En los hogares que hay niños, se engalanan con pinitos, nacimientos y piñatas de picos para alegría de los pequeñines, que crean que existe o no existe  el gordito  de colorado, ellos relacionan la fecha con juguetes, dulces y comida. La televisión y radio, aportan mucho al ambiente festivo con sus anuncios, comentarios y sobre todo música navideña;  el popular Jo jo jo jo se oye como un presagio de un día especial.





Pues bien, Los historiadores no se ponen de acuerdo en qué siglo nació el villancico, unos dicen que en el XIII y otros que en el XV, pero todos aseguran que eran sencillos y describía la vida común de las villas, y que luego destacaron los que cantaban por la navidad, en esta temorada no importa que sean villancicos o canciones,  son  cantos navideños, y la mayoría alaban el nacimiento del Mecías.  Según, en España su compositor más famoso fue el Marqués de Satillana y en México, Juana Inés de la Cruz, una intelectual, que dicen se vestía de hombre para poder tomar clases en la universidad vedada para las damas.




La melodía que primero reproduce la radio y tv en nuestro   panorama,  es Regalo de Reyes,  la cantó  y  compuso el mexicano David Lama Portillo (1925- 1985) quien formara parte de la orquesta de Agustín Lara, se le recuerda por interpretar Candilejas y a Rafael Hernández.  Esta es una de las canciones que más fama le diera a Javier Solís: “Ya va llegando diciembre y sus posadas/ se va acercando también  la Navidad/ el año nuevo me traerá nuevas tristezas/ y por tu ausencia lloraré de soledad…”

 Estas  se escuchan sin cesar en radio, tv y en los hogares, y según una página de internet son los 10 villancicos más famosos: 1 Campana sobre campana; 2 Ven a cantar; 3 Caminito de flores;  4 Los peces en el río; 5 Noche de paz; 6 Arre burriquito; 7 Marimorena; 8 Los campanilleros; 9 Los pastores a Belén; 10  El niño del Tambor.



Y yo añado conforme a mi humilde opinión: Feliz Navidad; Burrito sabanero; Rin, rin; Blanca Navidad; Rodolfo el reno; de todos estos hay innumerables versiones para todos los gustos,  sin olvidar, claro está, las Ardillitas en Navidad, con su travieso Pánfilo que una y otra vez escuchábamos de niños: “Somos ardillitas, somos tres no somos dos/ estamos muy contentos porque ahí viene Santa Claus…”

Según Wikipedia, Eduardo Guerrero, nace precisamente un 24 de diciembre de 1916, en Tucsón, Arizona,  y muere en California en 2005,  sus padres emigraron de Cananea Sonora, fue compositor y guitarrista México estadounidense, se le atribuye la paternidad de la música chicana, escribió muchas canciones, pero las más conocidas son La minifalda de Reynalda y Pancho López ¿Las recuerda?


Entre las canciones más tristes de esta temporada está Amarga Navidad firmada por el guanajuatense José Alfredo Jiménez (1926 – 1973), que se dice no sabía  nada de música, solo las silbaba para que escribieran la partitura, esta como muchas de sus canciones han sido  interpretada por un sinnúmero de cantantes nacionales y extranjeros: “Acaba de una vez de un solo golpe/ por qué quieres matarme poco a poco/ si va a llegar el día en que me abandones/ prefiero, corazón, que sea esta noche./ Diciembre me gustó pa´ que te vayas/ que sea tu cruel adiós mi Navidad/ no quiero comenzar el año nuevo/ con este mismo amor, que me hace tanto mal…”´



Y entre los canticos más melancólicos se encuentra: Ven a mi casa esta navidad; a quién estando en similares circunstancias no le da escalofrío al escuchar: “Tú que estás lejos de tus amigos, de tu tierra y de tu hogar/ y tienes pena, pena en el alma, porque no dejas de pensar/ tu que esta noche/ no dejas de recordar/ quiero que sepas/ que en nuestra mesa/ para ti tengo hay un lugar…/ interpretada y escrita por Luis Aguilé, presentado por Raúl Velasco en aquel legendario programa Siempre en Domingo.

 Hurgando acerca de este artista, conforme Wikipedia, su nombre completo fue Luis María Aguilera Picca, nace en Buenos Aires Argentina en 1936 y muere en Madrid España en 2009, se le recuerda por cantar: El preso número 9; Tú y yo; Pancho López; Ay Chabela; y por ser  autor de Juanita Banana y La banda borracha. La versión de Luis Aguilé es inolvidable, cada vez que la escucho recuerdo cuando estudiaba en Monterrey, una vez me tocó trabajar la tarde del 24 de diciembre, corrigiendo una edición especial en la editora Cronos, salí a las 4 de la tarde, tomé un autobús ya tarde, a las 12 de la noche estaba en Cd. Mante, aún lejos de mi familia.

Disfrutemos en esta Navidad, a Jesús, Salvador del mundo y personaje central del universo y de nuestras vidas, que dejó su encumbrado lugar junto a su Padre Dios, para venir a nacer en un humilde pesebre y enseñarnos a vivir con amor y disciplina, y darnos vida eterna y feliz.






Texto Publicado en: Kaniwá #32 Suplemento cultural del periódico La Opinión, Poza Rica de Hgo; Veracruz. México, el 13  de diciembre de 2015.





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