Por Elisa Cobos Enríquez.
Las aves, nos
dan ejemplo de compañerismo, solidaridad, responsabilidad y amor. Por ejemplo,
los tordos que en algunos lugares les dicen pichos, tengo la costumbre de
echarles tortillas en pedacitos.
Otra constante que encuentro
es que hacen guardia, siempre hay uno en el árbol, cuando ven que riego las
tortillas, uno se va y tarda minutos en regresar, cuando regresa vienen unos
14, los voy contando en cuanto llegan.
Y las palomas
son un ejemplo de amor, trabajo y ayudar, pues bien, cuando ya tienen el lugar
para el nido, entre los 2 acarrean las ramitas, en ocasiones uno se queda en el
nido arreglándolo, cuando ya está listo la palomita pone por lo regular 2
huevitos que entre los 2 empollan, mientras uno está en el nido el otro sale a
suplir sus necesidades. Tardan entre 20 y 21 días en nacer y entre los 2
alimentan hasta que están listos para volar y seguir como sus padres, la
reproducción.
Estas
observaciones me hicieron recordar y escribir
lo siguiente. Hace unos días pasó un hombre vendiendo pajaritos, era el
mediodía, el sol quemaba y los pajaritos iban bajo la inclemencia del sol. El
hombre se protegía con un sombrero de
paja y ala ancha, en cambio los animalitos iban con sus piquitos abiertos, han de haber tenido sed y
hambre, me entristece que muchos no sobrevivirían al día siguiente.
Me acordé de
una lección que venía en mi libro de primaria, se trataba de un hombre que se
encontró en la calle un vendedor de pajaritos, dicho señor los compró todos,
una a una fue abriendo las jaulas y los pajaritos se precipitaron felices a su
libertad.
__¿Qué ha
hecho usted? Le preguntó el vendedor asombrado, añadiendo que eran aves muy
finas, habían: gorriones, jilgueros, cenzontles, mirlos, cardenales, canarios.
A lo que el señor contestó: __”Acabo de salir de la cárcel por un delito que no
cometí, no puedo ver pajaritos enjaulados,
¿Qué delito cometieron ellos? ¿Solo porque cantan hermoso y son bellas?
No es justo que las tratemos así.
Yo hago una petición a las autoridades, que
apliquen las leyes de protección, deben estar libes, en su hábitat.
Texto
Publicado en: Kaniwá #63 Suplemento cultural del periódico La Opinión, Poza
Rica de Hgo; Veracruz. México, del 16 de julio de 2016.
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